Cuando de criticar al prójimo se trata, la mayoría se apunta en primera fila somos los jueces más severos con aquellos que cometen errores. Para ponerla fácil no voy a "criticar" a ningún colega de trabajo en este articulo, me criticaré a mi. (es más fácil de explicar en primera persona y más de uno se identificará secretamente conmigo)